Tanta belleza,
tanta estupidez en tus palabras.
Delicioso olor,
podredumbre en tu cruel pensamiento.
Brillo de labios,
metal en tu corazón vencido.
Suavidad de piel,
comezón en tu rabia privada.
Delicadeza,
malicia enredada en tu veneno.
Todo virtudes,
ninguna señal en tus pupilas.
De nada sirve,
ojos claros y piel blanca invierno
si cargas pena
y pasas por alto al mundo entero.
Guillermo Aárra
27-01-2009
11:17
27-01-2009
11:17
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